En más de una ocasión los periodistas y también los usuarios se obcecan y nos obsesionamos con una serie limitada de planteamientos, como si todos debiéramos ser iguales, cortados por el mismo patrón, o tendríamos que seguir los mismos postulados u objetivos.
Pero la vida es más rica y variada que todo eso, y así se demuestra en muchos ámbitos, también en el de la automoción.
El nuevo Peugeot 3008 es un claro ejemplo de ello, de cómo un automóvil es capaz de responder a las exigencias que cabe plantear en el mercado de hoy en día, pero desde una perspectiva diferente y diferenciadora.
Para comenzar, su estética exterior rompe moldes y esquemas prefijados. Combina, y ahí reside gran parte de su éxito, la imagen robusta de un todocamino o crossover con la funcionalidad de un monovolumen y el estilo más dinámico de un turismo familiar.
En cierto modo, aúna estos tres diferentes conceptos en una sola carrocería. Pero hasta ahí aporta aspectos novedosos y distintivos, como su portón trasero de doble hoja, con la parte inferior que rebaja notablemente el plano de carga y además es capaz de soportar pesos de hasta 200 kilogramos.
Igualmente, su logrado maletero (432 litros) cuenta con una bandeja que dispone de tres alturas posibles, sin olvidar su respaldo trasero fraccionado y abatible con sólo accionar un tirador, además de los huecos disponibles bajo los pies de
los pasajeros posteriores.
La habitabilidad que le reporta su notable altura de carrocería (1,625 metros, que se suma a una largura de 4,365 metros y a una anchura de 1,837 metros) es muy bien valorada tanto en las plazas anteriores como en las posteriores.
En las dos amplias, cómodas y elegantes butacas delanteras los afortunados conductor y copiloto disfrutan de una posición de conducción elevada y de una notable superficie acristalada, lo que a la postre reporta visibilidad y luminosidad.
En un entorno espacioso y muy confortable, el remate de aciertos llega de la mano de un puesto de control irreprochable.
Mucha información, unos mandos de tacto exquisito, todo en su sitio –especialmente la palanca de cambios–,
con un diseño elegante, materiales de calidad y un montaje cuidado, sin olvidar un equipamiento de primera, dibujan un panorama sobresaliente.
Peugeot ha puesto mucho mimo en el diseño tanto interior como exterior del 3008 y eso se nota desde el primer momento.
INVITACIÓN A VIAJAR La ciudad es un espacio muy aconsejable para el 3008, tanto por sus buenas cualidades dinámicas y lo placentero que es su manejo, como por la visibilidad que le reporta al conductor su posición elevada, que permite un control excelente.
En carretera también se disfruta igualmente, tanto o más que en autopista, donde este atractivo Peugeot se muestra
como un viajero incansable. El brillante motor de 1,6 litros y 112 CV convence por un funcionamiento refinado y consistente, además de contundente, como lo demuestran sus 270 Nm de par máximo, los 181 km/h de velocidad máxima o sus 12,2segundos en el paso de 0 a 100 km/h.
También los consumos convencen plenamente, con valores homologados de 6,5 litros en ciudad, 4,4 en carretera y 5,1 de promedio, con unas emisiones medias de 137 gramos de CO2.
El agrado de conducción es una de las grandes virtudes de este logrado Peugeot.
En frenos, dirección y neumáticos, el 3008 sigue respondiendo a la tradicional calidad del fabricante francés, que aunque se
ha hecho famoso como productor generalista también es capaz de ofrecer muchos y buenos modelos de nivel medio y alto, como queda constatado con este 3008, el 5008 y el recién llegado 508, por citar tres ejemplos.
Además de todas sus bondades ya descritas, aporta un equipamiento muy completo, con detalles como el freno de estacionamiento eléctrico, sensores de lluvia, aparcamiento y luces, climatizador bizona, regulador/ limitador de la velocidad, indicador de cambio de marcha, llantas de aleación de 17 pulgadas (con neumáticos en medidas
225/50) y faros antiniebla, entre otros elementos. Por un precio de 22.700 euros, este 3008 1.6 HDI 112
Premium se encuentra en un excelente punto medio de la gama, cuyas tarifas oscilan entre 18.260 y 29.580 euros, y demuestra que un producto de calidad y diseño diferente puede tener al mismo tiempo un precio asequible.
Aunque para diferente, lo que nos deparará el futuro de la mano del Peugeot 3008, que ya no se contenta con su perfeccionado sistema de tracción, Control Grip, al que suma los neumáticos de invierno (M+S, Mud and Show) y cinco modalidades de trabajo (nieve, barro, arena, sin ESP y con ESP estándar), ya que este año estrenará su versión más exclusiva
y tecnológica, la HYbrid4, que tendrá el honor de emplear un motor diesel HDI de 163 CV combinado con uno eléctrico de 37 CV, para sumar entre ambos 200 CV y 500 Nm, además de la tracción a las cuatro ruedas. Lo dicho, un coche distinto.
Si quiere un presupuesto pulse aquí